Nota de prensa

El sábado 27 de Abril a las 11:05 am en los predios del mijao en la torre Mene Grande de Los Palos Grandes en Caracas, todo estaba listo para celebrar Sant Jordi al modo caraqueño.

A todo el que iba llegando se le entregaba un libro y una rosa, acompañado por un coro lleno de buena vibra y alegría.

Melissa Nahmens y María Alejandra Bello del proyecto Qué Leer y Elena García de la agencia Comunica & Conecta, acompañadas por Luis Sequera de Fundación La Poeteca fueron recibiendo a todos quienes se fueron acercando al punto de encuentro. Dos bibliotecas llenas de libros de muchos autores, muchos géneros y formatos que se iban entregando al azar acompañados por una bonita rosa, e invitarles a pasar al espacio destinado para tomarse un cafecito o quedarse para las actividades que pronto comenzaban.

Una breve apertura por parte de Qué Leer y Comunica & Conecta, dieron la bienvenida a la primera actividad. Una conversación entre Gabriela Kizer, escritora y biografía de Ida Gramcko, y Diajanida Hernández, gerente de la Fundación para la Cultura Urbana, donde exaltaron la obra de la poeta y escritora en ocasión de cumplirse el centenario de su nacimiento. Todos los asistentes quedaron extasiados con la lectura de sus poemas.

Mientras seguían llegando personas, se dio lugar a la segunda actividad, la presentación formal y pública del libro Manual del distraído, del autor italiano Alejandro Rossi, nacionalizado mexicano y de madre venezolana; una edición exquisita y muy bien publicada por la editorial Libros del Fuego, donde el profesor y poeta Rafael Castillo Zapata junto a Alberto Sáez director de la editorial, conversaron sobre la obra de Rossi, leyeron fragmentos de las páginas escritas por el autor, mientras los asistentes disfrutaron de una grata y amena charla.

La narración de una experiencia personal de vida y muchos libros abrió la tercera actividad de la tarde a cargo de Victoria Jansen y su proyecto Jansen Au Pair, plan que desarrolló para jóvenes venezolanos que tienen la inquietud de estudiar otros idiomas, vivir experiencias foráneas. Victoria describió cómo fue ese camino a partir de su propia vivencia; leyó una sentida carta que su abuela le había escrito aupándole para realizar sus sueños y contó como estando fuera los libros eran su mayor y mejor compañía.

Una sorpresa tenía María Verónica Paiva, creadora de El Cocuyo Lector, que acompañada de sus lindas hijas y su esposo llegaron a disfrutar del evento. Ella era quien haría parte de la cuarta actividad, para cerrar la tarde llena de puntos de encuentro, se apropió de la carpa con 3 cuentos y así conquistar las sonrisas de los más pequeños, pero también de muchos grandes y demostrar que la lectura no es un tema de edades sino de entender que es el mejor beneficio que le podemos brindar a un niño para entender la vida.